Congreso esperanzador de periodistas santacruceños

¡Con la pasión de la verdad!, es el lema del 9no Congreso de la Unión de Periodistas de Cuba, previsto para julio de 2013, cuando se cumplirán 50 años de la UPEC, organizada por patriotas y revolucionarios para defender el ejercicio del periodismo y la verdad de la Revolución.

Anticipan el evento las asambleas de las delegaciones de base, donde se hace el verdadero Congreso.

Este del que hablo ahora, tuvo lugar en Santa Cruz del Sur, hasta donde llegaron autoridades políticas y de la Unión de Periodistas, junto a otros que fueron invitados para hablar de trabajo.

Confieso que me sentí importante, igual que mis colegas, aunque no dijimos de esto ni media palabra. 

Parecían más que nosotros, pero muy bien por asistir, pues su presencia revela el valor que otorgan a nuestro trabajo cotidiano, pero además ellos no estuvieron para dar indicaciones, ellos pidieron intercambio, y desde el puesto presidencial bajaron a la plenaria a dialogar, a discutir, a buscar juntos nuevas maneras de hacer mejor el periodismo radial y televisivo que hay que hacer en Santa Cruz del Sur, y hablaron, NO, como jefes, SI, como compañeros de lucha cotidiana.

Defender la verdad con pasión, nuestra verdad cubana, que siempre será revolucionaria, fue lo más hablado;  y hacerlo con las mayores riquezas materiales que contamos, esas que están en nuestros corazones, pero hacerlo también con lealtad, honradez, con apego a la realidad, por dura que sea, porque además de nuestro deber, es lo que quiere y espera el pueblo de sus periodistas.

Se habló también de superación, de hacer más en los concursos y de cómo el grupo-UPEC puede aportar mejor al trabajo reporteril.

Y discutimos bien fuerte el asunto del relevo, los que estudiarán Periodismo:

¿Cómo enamorar,  atraer, cautivar a los adolescentes con aptitud, cómo acercarlos desde ya a nuestra familia?

La actuación periodística en las redes sociales y en la vida usual de las calles cubanas interesó a todos, pues aunque se trate del mejor oficio del mundo, sino lo hacemos bien, se transforma su esencia, de ahí que vamos hacia el periodismo revolucionario que requiere el socialismo cubano hoy, en medio de fuertes  cambios, estimulados por los Lineamientos Económicos y Sociales del Partido y la Revolución.

Poco antes del final se pasó revista a la estructura de la organización y Yanaima Rodríguez fue ratificada como presidenta de la delegación de base de Radio Santa Cruz, a la cual pertenezco desde mi deber de reportera de la Corresponsalía de TV Comunitaria; y Katia Pérez y Hugo Betancourt, acompañarán a Yanaima en la jefatura.

Fue el congreso UPEC santacruceño una buena cita, y no piense que no se habló de los problemas, si y mucho, pero aun con ellos hay en nuestra tropa élite (periodistas de radio y televisión del sur de Camaguey) un enfoque positivo hacia la vida, esperanzador hacia el trabajo, hay optimismo, amor por los jóvenes, por los recién graduados que ya llegaron al sur, con quienes logramos una integración muy positiva, un binomio experiencia-juventud que se traduce en entusiasmo, compromiso, enseñanza y gratitud.

Dayesi y Edel, los nuevos reporteros de Radio Santa Cruz, hablaron en la cita para decir que les tocó una tarea dura en condiciones no muy confortables, pero están felices de empezar rodeados de afecto y ayuda sencilla, también porque quieren ser periodistas de trinchera, y Santa Cruz es un buen sitio para esa graduación.

Acordamos entonces: ponerle al oficio toda la pasión que lleva y publicar una prensa más moderna y atractiva, sin abandonar nuestra misión de guerreros, la que aprendimos del colega José Martí y que está intacta, sin necesidad de cambios:

"Decir lo que a todos conviene y no dejar de decir nada que a alguien pueda convenir. Que todos encuentren en el diario lo que puedan necesitar saber [...] El periódico ha de estar siempre como los correos antiguos, con el caballo enjaezado, la fusta en la mano, y la espuela en el tacón. Al menor accidente, debe saltar sobre la silla, sacudir la fusta, y echar al escape el caballo para salir pronto y que nadie llegue antes que él. Debe ser coqueta para seducir, catedrático para explicar, filósofo para meditar, pilluelo para penetrar, guerrero para combatir. Debe ser útil, sano, elegante, oportuno, valiente [...]"